He aquí un estupendo ejemplar de gaviota, con mirada fría, penetrante, buscando alguna víctima. Permanece quieta, inmóvil, callada, como una estatua de sal. Así mismo se ha quedado el Partido Popular, mudo. Después de varias semanas frenéticas de desmentidos a medias, de declaraciones extravagantes y contradictorias, de explicaciones inverosímiles e inasumibles a la inteligencia humana, por fin se hizo el .... silencio. Después de que Carlos Floriano manifestara que era un ejercicio de transparencia, el haberle pagado a Bárcenas la Seguridad Social hasta diciembre de 2012, cuando supuestamente había dejado el partido en 2010. Después de que Dolores Cospedal no fuese capaz de explicar en directo el asunto de la indemnización a Bárcenas en diferido, y que confundiera la cotización a la Seguridad Social llamándola retención. Al final, los cerebros grises del partido que nos gobierna han decidido instaurar el silencio. No creo que sea la mejor opción, pero ellos sabrán. Supongo que estando en silencio, tampoco hablarán más de la demanda contra Bárcenas que llevan anunciando hace algunas semanas. Llevan diciendo que la van a presentar, y que la van a presentar, pero aún no lo han hecho. Podríamos echar mano de la expresión que utiliza el gran cómico José Mota: Hoy no, mañaaaana. Quizás ya se hayan dado cuenta de que Bárcenas es mucho más listo que todos ellos juntos, y no se atreven ni a respirar.
