viernes, 28 de junio de 2013

Miren al pajaritoooo!

Hay que ver las tonterías que son capaces de hacer los políticos cuando se ponen a las órdenes de un fotógrafo. Aunque, que los políticos catalanes hagan tonterías para su mayor gloria o vergüenza, nunca se sabe, tampoco es algo tan extraño en estos tiempos. Según reza al pie de la fotografía, estos son "los miembros del Pacte Nacional pel Dret a Decidir". El derecho a decidir, algo tan básico y fácil de entender. No logro comprender que haga falta tanta gente, tanto pacto y tanta pompa. Todos decidimos muchas cosas. Puedes ir en metro, en autobús o andando, y decides. Puedes comer pollo o pescado, y decides. Puedes ponerte una camisa de rayas o de cuadros, y decides. Puedes ir al fútbol, al cine o al teatro, y decides. Es evidente que decidir, decidimos cada día muchas cosas. Qué significa entonces el Dret a Decidir?. Pues parece ser el eufemismo trasnochado de estos individuos que quieren tener una reseña de gloria en los libros de historia, a costa del sufrimiento de los ciudadanos en estos tiempos de histeria. En lugar de llamarlo "Queremos la independencia", se parapetan en el pueblo y lo venden como que el pueblo quiere decidir. Una vergüenza y un despropósito, se mire por donde se mire. Los ciudadanos queremos decidir, naturalmente que si. Queremos decidir que nos gobiernen políticos serios, honrados y trabajadores. Queremos que entiendan los problemas que acucian a sus conciudadanos, y los acometan con valentía, honradez, seriedad y buena gestión. Queremos que no eludan los problemas reales apuntando a metas aventureras y utópicas. Queremos decidir que la ciudad de Barcelona sea un lugar amable para todos. En esta ciudad vive mucha gente todo el año y sufrimos las consecuencias de que el Ayuntamiento trata a toda costa de hacerla amable solo a los turistas. Queremos decidir que no se nos imponga ni una lengua, ni la otra, porque oficialmente en Cataluña hay bilingüismo. Queremos decidir que haya una educación digna, competente y de calidad, donde se hable con objetividad de Cataluña, de España y del mundo. Queremos decidir que haya una Sanidad de verdad, bien atendida por buenos profesionales, universal y gratuita, sin listas de espera. Queremos decidir que se cree el clima adecuado para que se implanten empresas y se produzca creación de empleo y oportunidades para todos. Queremos decidir que los políticos corruptos desaparezcan de la escena política y purguen sus delitos con una justicia rápida y eficaz. La utopía de la independencia va a solucionar todo esto?. No, en absoluto!. Antes al contrario, aún puede agravarse más el desequilibrio social, amén de conflictos internos que pueden surgir, que ahora no existen. Muchas personas importantes del mundo empresarial y político, ponen el grito en el cielo por el error de cálculo tan grande que pretende llevar adelante el gobierno autonómico catalán. Además, mientras tanto, solo están dedicados a esta tarea. Parece que no hay pobreza en Cataluña, parece que no hay personas sin hogar, parece que no hay desempleo, parece que no hay gente desnutrida, parece que no hay fracaso escolar, parece que no hay ancianos dependientes aislados en sus casas. Para ellos todo está bien, y se ponen a jugar a la independencia. Pues no señorías, no es así. Cuando seamos una comunidad seria, cuando haya trabajo para todos, cuando haya vivienda para todos, cuando haya comida para todos, cuando haya justicia de verdad, cuando haya buena educación, cuando haya sanidad de primera, cuando llegar a fin de mes no sea la travesía del desierto, cuando los ciudadanos tengan los servicios bien cubiertos, entonces y solo entonces, si les queda tiempo dedíquense a frivolidades. Mientras tanto, los ciudadanos queremos decidir que nuestros políticos cumplan con su trabajo, que es el de gobernar lo mejor que puedan con los recursos de que disponen, para facilitar la vida de sus conciudadanos, con una gestión eficaz y transparente.  Y dejen ya de mirar al pajarito!.